1. El amor vence siempre. La Penélope Qué verdadero gusto haber conocido a La Penélope, un increíble personaje a medio camino entre la estanquera de Vallecas y la farmacéutica de Olot: la farmacéutica de Vallecas. Me manda un buen amigo esta tarde a por mandanga (vaya día recogiendo mandanga señora, agotaor) a una farmacia de Vallecas. Allí aparece la Penélope con su farmacia petada de cosas para darnos procedentes de sus abuelitos que han fallecido en una buena proporción, la mayoría contagiados por el COVID-19 en el centro social donde jugaban a cartas y demás. Lleva desde que empezó la crisis alimentando!!, Dios sabe cómo, a gente mayor y del barrio que pasa necesidad. La pequeñez de su porte físico encierra un corazón de oro para el barrio. Una persona más, a Dios gracias, dedicada a “bocatear” sin parar. El marido, agotao lo tiene, se va a descansar. Jorge, el pater, y yo nos vamos con una sonrisa en la cara mientras la ciudad despierta con cantidad de gente dando su paseico al bello sol del atardecer. La Penélope continúa con su Farmacia y su ayuda a la needy pipol. Qué gusto. Abriremos un nuestro garaje el Penelope´s corner para que entre todos vayamos rellenándolo con papeo para sus abuelis. ¿Y Dios? Aplaudiendo con las orejas viendo el espectáculo. Así da gusto. El amor vence siempre. (Aunque no siempre se vea)